Tradiciones ancestrales y costumbres más modernas se dan la mano cada año en Gran Bretaña para recibir la Navidad. El muérdago, los calcetines en la chimenea, las tarjetas navideñas, el Boxing Day, los crackers, unos petardos que montan mucho jaleo, o el abeto forman parte de unas fiestas familiares con sabor británico. Según una creencia druida, el muérdago protege contra los demonios y trae suerte a los hogares en los que luce. Esta arraigada tradición está muy presente en la Navidad británica. Durante estos días no suelen faltar los ramos de muérdago adornando los hogares del Reino Unido. La Navidad en Gran Bretaña no sería lo mismo sin los «crackers», unos petardos pequeños que estallan cuando se parten en dos. Contienen un gorrito, un regalo y un chiste –que suele ser bastante malo– junto con papeles de colores que se esparcen con el estallido. El 25 de diciembre la familia se reúne, enlaza sus brazos alrededor de la mesa sujetando cada uno un extremo de la mecha y hacen detonar t